Renacimiento vikingo

La fascinación estadounidense con el diseño escandinavo comenzó tan pronto como el renacimiento vikingo a finales del siglo XIX, que alcanzó su apogeo durante la World's Columbian Exposition de 1893 en Chicago. Ese año, Noruega envió el barco Viking, una réplica de una embarcación del siglo IX recientemente descubierta, a Chicago, donde permaneció durante toda la feria. En esta época, la profusión de imágenes vikingas (como el tradicional motivo del dragestil, o “estilo dragón”, en plata, cerámica y muebles) conllevaba asociaciones de orgullo étnico para los inmigrantes escandinavos. Hoy en día, en los países nórdicos, así como en los Estados Unidos, algunos grupos políticos de derechas han cooptado retórica vikinga y los motivos visuales para promover un nacionalismo racialmente divisivo.