Florero, hacia 1950

La artista finlandesa Maija Grotell fue uno de los muchos inmigrantes escandinavos que disfrutaron de una larga carrera docente en los Estados Unidos. Grotell se incorporó a la Cranbrook Academy of Art en 1938 como directora del departamento de cerámica, transformándolo durante casi treinta años de un programa recreativo a uno que producía ceramistas y profesores profesionales, como Toshiko Takaezu. La propia Takaezu se convirtió en una importante profesora, famosa por perfeccionar la forma de cuello pellizcado con abertura en forma de agujero de alfiler, como se ve aquí, ya que buscaba la mayor superficie posible en sus vasijas.