Viajes al extranjero

Los viajes entre los países nórdicos y los Estados Unidos constituyeron un modo sostenido de intercambio cultural, realizado a través de becas de viaje, programas académicos formales, aprendizajes y proyectos independientes. Por ejemplo, después de la Segunda Guerra Mundial, tanto los diseñadores estadounidenses como los escandinavos viajaban de un lado a otro con frecuencia gracias al programa Fulbright, patrocinado por el gobierno estadounidense y fundado en 1946 para fomentar el intercambio educativo internacional. Tales programas permitían a los diseñadores escandinavos estudiar o trabajar en los Estados Unidos, y a los diseñadores estadounidenses buscar formación avanzada, enseñar o colaborar con sus homólogos de los países nórdicos. Estas redes transnacionales, y las relaciones personales resultantes, fueron fundamentales para la realización de muchos desarrollos de diseño. A diferencia de los inmigrantes de la primera sección de esta exposición, estas figuras vivieron temporalmente en el extranjero, llevando los nuevos conocimientos a su país de origen.