Un vestido negro de McQueen con cintura alta de corte imperio alude a la silueta imperante en la época de la Regencia; del torso cuelgan bellotas, símbolo de estabilidad habitual en las artes decorativas británicas. Además, un vestido de gasa de seda de la década de 1820, también en negro, presenta un diseño de anclas y coronas que celebra el poderío de la marina británica, la mayor del mundo en los siglos XVIII y XIX.